Nuestros Principios
El 21 de septiembre de 2013 marcó un antes y un después en el barrio de Parquesol. Fue el día en el que el Colectivo “La Gallinera” ponía en marcha la primera actividad de muchas que se van a realizar. Fue una jornada larga y cansada, pero ilusionante para quienes participamos en ella.
«Triple Corona» ganadores del torneo de fútbol
Todo empezó con el deporte como carta de presentación, unos torneos de fútbol sala y baloncesto que llenaron las pistas del parque de los Almendros desde las 10 de la mañana del sábado, cosa que no ocurría desde hace mucho tiempo: los partidos que antaño se jugaban entre desconocidos han caído en el olvido desde que el viernes por la noche es uno de los momentos duros de la semana.
«Pero si es gres» ganadores del torneo de Basket
Las carreras, las caídas, los goles, las canastas y los piques entre jugadores ocuparon una mañana soleada y calurosa que acompañó a quienes sudamos por alzarnos con un trofeo final que tenía más valor moral que material.
Comida Vecinal
Después de que finalizasen los torneos, para reponer fuerzas, una buena comida popular, con sus sopas de ajo, bocatas de setas, fiambre… y las aportaciones de quienes se acercaron (qué buena la tortilla de patata!). Cobijándonos bajo la sombra de los árboles, en el césped, un picnic improvisado lleno de buen rollo y alegría, auguraba una tarde apacible en compañía de los vecinos.
Jugando al sogatira en el Anfiteatro
Ya por la tarde el anfiteatro fue el protagonista de la actividad. El foso de piedra que ahora luce pintadas desordenadas y sucias, asientos con malas hierbas y cristales producto del ocio más descuidado, debe volver a tener la luminosidad de antaño, donde los conciertos, el cine y el teatro eran los que daban vida a un lugar con mucho potencial y que está abandonado a su suerte, bajo un manto de burocracia y trabas que evitan que se pueda usar por los vecinos de forma legal. Y es que, desde los órganos administrativos de Valladolid, por alguna razón que no conocemos, tratan de hacer que nuestra ciudad sea gris y triste, que la única forma de disfrutar de la música, sea la que se propone desde el Ayuntamiento en las fiestas patronales, en las del barrio, o pagando en las pocas salas que pueden organizar conciertos.
Concierto de Guille Jové
Cuando debatimos sobre la posibilidad de organizar un concierto en el anfiteatro y devolverle la vida, hubo que zambullirse en las ordenanzas y reglamentos del Ayuntamiento de Valladolid para conocer cómo lo podríamos hacer y, la verdad, fue bastante desolador: para empezar, no se pueden tocar instrumentos de percusión (baterías, djembés, tambores…) ni trompetas en la vía pública, ya que son instrumentos que hacen mucho ruido y pueden molestar (excepto en Semana Santa), ni amplificadores; para poder organizar un concierto en la vía pública, se ha de contratar un seguro de responsabilidad civil, pues el Ayuntamiento no quiere asumir ninguna responsabilidad, cuya cuantía varía dependiendo del aforo previsto, la localización, las salidas, etc, además de seguridad privada, lo que supone más gastos. Éstas son medidas que suponen una criba, un impedimento para que asociaciones culturales y vecinales puedan organizar alguna actividad que no sea de las que el Ayuntamiento o ciertas empresas pretenden, ya que el cumplimiento de estos requisitos no supone que automáticamente se pueda organizar el concierto, sino que el Ayuntamiento deberá dar el permiso, presentado con 20 días de antelación. El Colectivo, como otras muchas organizaciones, no puede hacer frente a los gastos que supone tener todos estos requisitos, así que optamos por la solución más factible: organizar conciertos pese a todo, exponiéndonos a unas sanciones que podrían ascender hasta los 600 euros por organizar un concierto sin la autorización pertinente.
Concierto de Astrolabio
Sea como fuere, allí estuvimos, comimos, escuchamos buena música a cargo de Guillermo Jové y Astrolabio, jugamos a la sogatira y, en definitiva, demostramos que se pueden organizar actividades que supongan una alternativa limpia, cultural y vecinal, utilizando los espacios públicos que algunos quieren que estén abandonados y sucios.
Torneos Deportivos (vista general)
Como se decía al principio, ésta es la primera actividad que organiza La Gallinera, pero la primera de muchas. Nos dimos a conocer a la vecindad de Parquesol con propuestas frescas y sopas de ajo y, esperemos, sirva para que quien tenga ideas en la cabeza y no sepa como ponerlas en marcha, se acerque a las asambleas para participar activamente en un proyecto viable y con futuro.
La Gallinera 
¡Enhorabuena y muchas gracias por la iniciativa! Es estupendo y creo que poco a poco, con estas propuestas, que cada vez van a más, haremos una ciudad y un mundo más bonito y humano. Y a escala más doméstica, que se pierda el miedo o la vergüenza a hacer más vida de calle. Yo no pude ir, pero estaré al tanto de las actividades.
Una de las primeras cosas que debe hacer una sociedad, libre y responsable, es no acatar las imposiciones y prepotencias de una administración que no asume ninguna responsabilidad, pero que sí se apunta a recaudar sin ningún tipo de sonrojo. Estaré atento a las siguientes iniciativas, pues acabo de mudarme al barrio.